No pretender ser mejor ni único, sino ser diferente y eso es precisamente lo que nos hace ser mejores dentro de un equipo, nos complementamos para llegar al objetivo propuesto. Destacar porque el cliente nos ha elegido, algo le hemos aportado diferente para que nos elija entre un amplio abanico de posibilidades: el mercado es competitivo y se trata de aportar valor diferencial para que no sólo nos compre una vez sino que vuelva y nos recomiende como marca o como el vendedor que le ha ofrecido ese producto o servicio.
Recuerda que todos somos únicos, cada uno de nosotros tenemos y hemos vivido una serie de experiencias y características, somos diferentes por nuestra calidad de ser humano. Las etiquetas no sirven para nada, cada uno actuamos de manera distinta por naturaleza y debemos marcar nuestra esencia.
Sobre «etiquetas»… te he puesto el enlace al anuncio de Audi, ¿lo habías visto?
Debemos dar un paso atrás y observar el ambiente: como se comportan nuestros potenciales clientes. Debemos tener una actitud de servir al cliente siempre, éste aunque no lo diga o no lo manifieste hace una evaluación constante de cómo se le atiende y percibe la actitud de quien le atiende. La cortesía y la amabilidad nunca desagradan al cliente pero lo que necesitan es soluciones – Ser diferente siendo creativo, original y motivado para los cambios.
¿ cómo vendes tú ? ¿ como marcas la diferencia para que el cliente compre tu marca ?
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